Esta vez nos centramos sobre todo en hablar de los líderes.
Distinguimos entre los líderes autoritarios y facilitadores, que también podemos denominarles como conductores del grupo.
Los autoritarios buscan enganchar a la gente a sus ideas y opiniones,
aunque a veces al principio el camino por el que te conducen esté bien. Son más
peligrosos si manipulan sin que se noten. Terminan enfermando al grupo.
Los Facilitadores o Conductores aceptan que no tienen ni la verdad ni
la capacidad absoluta; hacen que cada componente del grupo pueda
desarrollar sus capacidades. Muchas veces expresa lo que los demás
piensan pero no se atreven a expresar. También ha de saber decir lo que
no se quiere escuchar (señalar lo que no está bien) mas sabiendo cómo
se dice, que una y no divida.
Por último nos acompaña el recuerdo de un gran líder del barrio, Manuel Murciano, "por donde caminaba crecían flores y se expandían buenos perfumes"...
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